El proyecto del mes de Diciembre de Adictos a la Escritura se titula "Versionando la Navidad"...
El ejercicio consiste en relatar un cuento de Navidad no tradicional, el género y el estilo son libres siempre que se respete la temática...
Los dejo con el mío...
Tengo el recuerdo, vago por cierto, de mi anciana bisabuela afanándose en la cocina de su enorme casa por aquellos tórridos días de diciembre; nadie parecía darle demasiada importancia a lo que hacía... Pero ella, empeñada en mantener vivo el recuerdo y la celebración, cocinaba, decoraba la casa y el jardín, seleccionaba mantelería y vajilla y hablaba... La mayoría de las veces hablaba sola, simplemente porque nadie se detenía a escucharla y terminaba en una letanía de relatos para nadie...
Toda la casa brillaba de rojos y verdes y en la noche por ella indicada, un poco por obligación (se vé que ya mucho no le quedaba a la señora) todos se sentaban a la mesa y fingían compartir la bella cena... (En realidad era una puesta en escena, mamá atendía a sus jefes que llamaban desde Dinamarca, papá hacía teleconferencia con Tokio, mi hermana mayor salía disparada de la mesa porque al día siguiente tenía que rendir y los mas pequeños jugabamos y disfrutabamos esa comida especial, casera como casi nunca veíamos...)
Pero... en este momento, en que estoy sentada en la mesa examinadora del último final de mi carrera de historiadora (cuando todos mis amigos esperan fuera de la universidad para llevarme a festejar, cuando en casa mis familiares programaron una fiesta de graduación) me hubiese gustado prestarle mas atención a la anciana dama y así poder contestar la última pregunta que define mi nota...
“QUE CUERNOS ES LA NAVIDAD???”